Por Jesús Rivera
Reynosa, Tamaulipas. A partir de hoy queda terminantemente prohibido fumar en público.
De acuerdo con el decreto publicado el 31 de mayo de 2022 y publicado el 14 de diciembre en el Diario Oficial de la Federación, ya no se podrá fumar en espacios públicos abiertos o cerrados.
Esa disposición tiene como propósito cumplir el acuerdo establecido con la Organización Mundial de la Salud de lograr que México sea un país libre de humo de tabaco.
De esa manera, también desaparecen los espacios que los restaurantes y otros establecimientos comerciales asignaban como “área de fumar”.
Se considera que el humo producido por los fumadores, al llegar a los pulmones de las personas que están a su alrededor, es más dañino que el que se produce directamente por la combustión del tabaco.
A la larga, la exposición al humo de tabaco favorece la aparición de enfermedades tales como bronquitis crónica, enfisema pulmonar, cáncer de pulmón, hipertensión arterial, enfermedades coronarias, accidentes cerebrovasculares, úlceras gastrointestinales, gastritis crónicas, cáncer de laringe, cáncer bucofaríngeo, cáncer renal o de vías urinarias e impotencia sexual en el varón. Además, en las mujeres, la probabilidad de padecer un infarto se multiplica por 10, la menopausia se adelante entre dos y 3 años y aumenta el riesgo de osteoporosis.
El humo de tabaco contiene, entre otras sustancias, benceno, nitrosaminas, benzoapreno, 1,3-butadieno, cadmio, formaldehído y acetaldehído.
A pesar de las imágenes que las empresas productoras de cigarros imprimen en las cajetillas, donde se aprecian los efectos nocivos del tabaco en la salud de las personas, el número de fumadores no ha disminuido.
Seguramente a partir de ahora fumar será una escena que ya no se verá más en público.