Por Jesús Rivera
Reynosa, Tamaulipas. ¿Por qué solo la futura Concatedral de Matamoros-Reynosa debe recibir su “manita de gato”?
El confesionario, lugar donde miles de feligreses han expiado sus culpas también merece ser remodelado.
-¡Ave María Purísima!
-Sin pecado concebida.
-Hijo/a, dime tus pecados…
Así empiezan todos los sacerdotes católicos el acto de confesar a los fieles que acuden contritos y arrepentidos.
¿Cuántos secretos no habrán escuchado los castos oídos de los curas en ese confesionario?
En su cuenta de Facebook, el padre José Luis Cerra Luna expresa su alegría de que también a ese histórico mobiliario le haya llegado la hora de recibir una bien merecida renovación.
El prelado subió el siguiente comentario: “¡Cuánta misericordia divina se ha prodigado en el confesionario de nuestra Parroquia! ¡Sólo Dios sabe cuántas personas han encontrado ahí el perdón, el consuelo, la luz para sus vidas! ¡Sólo Dios sabe las historias que por décadas han sido compartidas en el sacramento del perdón! Como párroco, lo veo como mi confesionario, ahora lo compartimos el P Honorio y el P Luis Enrique; pero cuántos hermanos sacerdotes se han sentado por horas a recibir a los fieles que buscan perdón ¡Dios se lo pague!
Ahora toca al confesionario también su restauración… ya se lo llevaron, de veras que ya le urgía”.
Acompañó sus palabras con una serie de fotografías del mueble, en evidente estado de deterioro donde muchos reynosenses posaron sus rodillas mientras comulgaban solicitando la gracia divina.