Por Jesús Rivera
Reynosa, Tamaulipas. Cada vez es más frecuente ver en las redes sociales fotos y comentarios de militares que esperan con ansia las órdenes superiores para atacar al crimen organizado con todo el poder de las fuerzas armadas del país.
En la cuenta de Facebook del usuario Sargento Garcia Fuerzas Especiales (Sargento Ghost), se lee el siguiente mensaje: “Se llegó la hora de la cazería”.
Acompaña al comentario una fotografía del “Sargento Ghost” portando un pavoroso lanza misiles tierra-aire.
El mensaje, con menos de una hora de haberlo subido a su red social, tiene 197 likes, 27 comentarios y se ha compartido 7 veces.
Días antes, otro elemento de la milicia hizo un comentario similar: “Solo falta luz verde!-decía su mensaje y mostraba la foto de un helicóptero fuertemente artillado.
Este tipo de manifestaciones entre miembros de las fuerzas armadas ocurren en vísperas del cambio de Gobierno Federal.
Actualmente prevalece la política de no agresión a los delincuentes organizados, lo que ha permitido que los cárteles se fortalezcan, que se hayan incrementado las células de la delincuencia y que la cantidad de muertos sobrepase los 180 mil en el sexenio.
Ayer, en una conferencia de prensa, el Comandante de la Tercera Región Militar con sede en Sinaloa, Francisco Jesús Leana Ojeda, comentó a medios de comunicación que la paz en la región no depende del Ejército, sino de los grupos antagónicos que se están confrontando entre ellos. “Que dejen a la sociedad en paz”-pidió.
La guerra entre “Los Chapitos” y “Los Mayos”, a diez días de iniciar, arroja 32 personas muertas, entre ellos, dos militares, así como 30 detenidos.
Esta postura contrasta con la ansiedad de los militares de tropa que están ansiosos por batirse contra los delincuentes y lo manifiestan en sus redes sociales.
Mensajes como el del “Sargento Ghost” hacen suponer a los usuarios de Facebook que en realidad están esperando la orden presidencial para combatir de frente a los criminales.
Sin embargo, en sus últimos mensajes, la Presidenta entrante Claudia Sheinbaum ha mencionado que no es posible una confrontación directa con el Crimen Organizado porque sería entrar en una guerra.