Por Jesús Rivera
Reynosa, Tamaulipas. De unos años a la fecha, Reynosa ha sido invadida por comercios que venden productos chinos.
Un breve recorrido por la peatonal Hidalgo basta para verificar la creciente oferta de artículos procedentes de ese país oriental.
Conforme México refuerza sus lazos con China y los Estados Unidos se aleja del gigante asiático, la invasión amarilla se hace cada vez más evidente en esta frontera.
Mientras que en McAllen y demás poblaciones del sur de Texas las tiendas chinas están cerrando, en Reynosa y la frontera norte de México cada día aparecen nuevos establecimientos con mercancía diversa.
Recién abrió sus puertas un inmenso local comercial que abarca una cuadra entera, con tres pisos, en la calle colón, frente a las oficinas de correo.
La Tienda China ofrece miles de productos que van desde electrónica, a enseres del hogar, deportes, construcción, decoración, ropa, juguetes, artículos escolares, productos navideños y muchos más.
La demanda de la población por mercancía barata, aún cuando no sea de la mejor calidad, sostiene la operatividad de los negocios.
La mayor parte de ellos pertenecen a inversionistas de Tampico que vienen a la frontera con un enorme inventario de productos fabricados en China.