Por Jesús Rivera
Reynosa, Tamaulipas. La muerte del senador Faustino López no termina con las esperanzas de miles de ex braceros que aún están en espera de recibir los 38 mil pesos por concepto de su fondo de ahorro.
Como se recuerda, de 1942 a 1964 los gobiernos de México y Estados Unidos pusieron en marcha el Programa Bracero, donde millones de hombres y mujeres procedentes de diferentes Estados de nuestro País fueron contratados en los campos norteamericanos ante la falta de mano de obra local.
Durante ese período, el Gobierno de los Estados Unidos envió a una cuenta del extinto Banrural el 8% del sueldo retenido a cada uno de ellos.
Con el paso del tiempo, se acumularon miles de millones de pesos que después fueron sustraídos para financiar las campañas políticas de candidatos del PRI.
Tuvieron que pasar casi cuarenta años para que alguien se diera cuenta que todo ese dinero correspondía a los ex braceros y que, sin embargo, ya no estaba más a resguardo de BANRURAL, porque simplemente el Gobierno Federal lo desapareció.
Tras negociaciones a nivel de las Cámaras de Diputados y Senadores, se integró una Comisión y posteriormente, una Mesa para la Recepción de documentos y solicitudes a cargo de la Secretaría de Gobernación.
Fue en el sexenio de Vicente Fox y luego en el de Felipe Calderón, que miles de personas, ya de muy avanzada edad, se beneficiaron, pero no con la cantidad que les correspondía, sino con un monto ínfimo.
Cálculos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) indican que en realidad cada uno de ellos debió recibir más de un millón de pesos. A final de cuentas, el Gobierno accedió a pagar solamente 38 mil pesos a los braceros que aún estaban vivos y que contaban con los documentos necesarios o a sus familiares directos.
Marcos Heredia Medrano, Secretario General de la Unión General de Obreros y Campesinos, manifestó que el fallecido Senador Faustino López era el encargado de gestionar el pago de los 38 mil pesos a los ex braceros que no lo recibieron en anteriores entregas.
El trágico accidente en que perdió la vida frenó un poco dicha gestión, sin embargo, Heredia Medrano comunicó que el proceso sigue adelante, ahora con el Senador Ricardo Monreal Ávila y otros legisladores.
“Esta no es una dádiva ni una prebenda-dijo-; es el esfuerzo, el trabajo que hicieron en aquellos tiempos los ex braceros y es justo y necesario que tengan la recuperación del mismo”.
A la fecha, quienes aún están en espera de su dinero se enfrentan con la amenaza de desaparecer el llamado “Fondo Social para Ex Trabajadores Migratorios Mexicanos 1942-1964”, conocido como Fideicomiso 2106.
Durante el sexenio de Enrique Peña Nieto y lo que va del de Andrés Manuel López Obrador, no se ha pagado un solo centavo de este fondo.