Panteló, Chiapas. Miembros de un grupo de autodefensa de Pantelhó, Chiapas, se alzaron en armas para combatir a los terratenientes y a los narcotraficantes.
Para ello, lograron sorprender a un grupo de soldados a quienes les quitaron armas, municiones y pertrechos.
Como resultado, el Ejército Mexicano, la Guardia Nacional y la Policía Estatal desplegaron un impresionante operativo que logró identificar y detener a los rebeldes.
“Nos alzamos en armas para combatir al crimen organizado y más de 20 años de cacicazgo en este municipio”,-aseguraron a medios locales y estatales de comunicación.
Señalaron que no se retirarán hasta que se haya limpiazo la zona para dejar en manos de las autoridades su proceso de elección por usos y costumbres.
El “Grupo de Autodefensa para la Vida de Pantelhó” envió a los medios el siguiente comunicado donde dieron a conocer los motivos de su irrupción en Los Altos de Chiapas.
“Poco a poco fue tomando fuerzas los que oprimen al pueblo, pues fue en el año 2002 cuando el señor Austreberto Herrera Abarca se quiso autonombrar para ser juez municipal de Pantelhó”,-aseguraron. Además, dijeron que el propio Austreberto abrió las puertas de esas comunidades al crimen organizado y ahí empezaron a matar a los que se oponían a sus actividades.
Los rebeldes tomaron el poblado, tras una breve escaramuza donde resultaron heridos seis policías estatales y tres del Ejército.
En un operativo que más bien parecía un rodaje de una película de Hollywood, las fuerzas armadas lograron recuperar la población de Pantelhó, lugar que quedó vacío puesto que la población y autoridades civiles huyeron tras los hechos violentos ocurridos en días pasados.
La excesiva fuerza utilizada por la milicia para sofocar a un pequeño grupo de tzoltziles inconformes en una serranía alejada de Chiapas contrasta con la poca acción que se ve en el resto del país para combatir al crimen organizado.
