Por Jesús Rivera
Reynosa, Tamaulipas. Mil setecientos cuarenta y cuatro casos positivos de COVID-19 se registraron hoy en Tamaulipas, una nueva cifra récord en lo que va de la pandemia para un solo día.
Esto es causado por el relajamiento social, pero también por la presencia de la Variante Ómicron, que se ha vuelto dominante en la mayor parte del país, mucho más contagiosa que otras cepas.
En contraparte, solo hubo cinco defunciones, lo que indica que, a pesar del “pico” histórico, el índice de mortalidad es mucho menor con respecto a las otras variantes.
A la fecha, se han registrado en el Estado 113,258 casos positivos, de los cuales 93,949 se han recuperado y han fallecido 7,092 personas.
Este día hubo 121 casos más en Nuevo Laredo, 4 en Ciudad Guerrero, 7 en Ciudad Mier, 12 en Miguel Alemán, dos en Camargo, 241 en Reynosa, 60 en Río Bravo, 14 en Valle Hermoso, 377 en Matamoros, 39 en San Fernando, 3 en San Carlos, 7 en Jiménez, uno en Abasolo, 12 en Soto la Marina, uno en Llera, 8 en Aldama, dos en González, 151 en Altamira, 148 en Ciudad madero, 244 en Tampico, 54 en Ciudad Mante, 20 en Tula, 4 en Gómez Farías, 10 en Xicoténcatl, uno en Palmillas, 5 en Jaumave, 179 en Ciudad Victoria, dos en Ciudad Madero, uno en González y 14 en Padilla.
Las defunciones: Dos en Matamoros, una en Nuevo Laredo, una en Ciudad Victoria y una más en Miguel Alemán.
En Reynosa hace cinco días que no se presentan decesos.
Están en Semáforo Rojo 32 Municipios, en Naranja 3, en Amarillo 3 y en Verde 5.
VUELTA A LA VULNERABILIDAD
Las autoridades de Salud del Estado urgieron a la población a reforzar las medidas de prevención de todos conocidas: REspeter la sana distancia, usar el cubrebocas, lavarse las manos con frecuencia o usar gel antibacterial, vacunarse, no participar en actos masivos bajo techo…
La Variante Ómicron ha tomado a los habitantes de Tamaulipas descuidados, porque no se tomó en cuenta que ya han pasado más de seis meses desde que se empezaron a aplicar las vacunas.
Autoridades médicas consideran que la vacuna mantiene un porcentaje de inmunidad ante el virus durante ese lapso de tiempo.
Por eso es necesario aplicar el refuerzo.
A pesar de su enorme virulencia, Ómicron resulta menos agresiva que la cepa original y otras variantes.
A la fecha, un porcentaje cercano al 50% de la población porta el virus de manera asintomática o sintomática, de acuerdo con cálculos que realizan personas encargadas de tomar muestras para las pruebas de detección de COVID-19.