Por Jesús Rivera
La comunidad migrante y el personal que labora en el albergue “Senda de Vida” elevarán una oración para que autoridades federales no lleven a cabo la amenaza de desalojarlos y demoler el complejo de edificaciones que se encuentra en la zona de impacto del río Bravo.
Mediante las redes sociales, el Comité de Bienvenida al Valle del Río Grande difundió un mensaje que dice lo siguiente: “¡Salvemos Senda de Vida! Acompáñanos a una sesiónd e oración en protesta a la amenaza del gobierno de México de demoler el albergue. ¡Ven y muestra tu apoyo! Viernes 30 de julio del 2021, de 5:00 pm a 6:30 pm. Albergue Senda de Vida”.
La semana antepasada, la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA) solicitó al Municipio de Reynosa que se desalojaran las instalaciones de esa casa de asilo a migrantes, por estar construidas sobre el lecho del río Bravo.
La CILA utiliza la zona de impacto para canalizar las crecientes del río durante las grandes avenidas causadas por algún fenómeno meteorológico, como los huracanes.
Desde hace 17 años, Senda de Vida empezó a construir en ese lugar, mediante aportaciones de asociaciones internacionales y gubernamentales.
Hoy es un complejo de edificaciones que incluye dormitorios donde pernoctan centenares de migrantes, un templo evangélico, un comedor, oficina, bodega, cancha deportiva, la residencia del pastor Héctor Silva De Luna y más recientemente, un terreno donde se construye lo que será un nuevo refugio para migrantes.
Más de 600 personas de distintas nacionalidades y razas, incluyendo familias con niños, son atendidos en ese lugar.
La intervención de organizaciones como la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Tamaulipas (CODHET) a favor de la permanencia de “Senda de Vida” en el lugar que actualmente ocupa, derivó en dos demandas de amparo, las cuales están en etapa de presentación de pruebas en los juzgados 7 y 8 de Distrito.