Dirección General: Jesús Rivera Zúñiga

Nadie le besó la mano al Presidente

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Por Jesús Rivera


Reynosa, Tamaulipas. Está vez, en Reynosa, no hubo quien le besara la mano al Presidente López Obrador.

Normalmente, al sitio que llega, se forma una Marabunta de gente que lo quiere ver, saludar, tomar la selfie con él, ponerle colguijes en el cuello y hasta besarle la mano.

Es un espectáculo denigrante que ocurrió en Matamoros pero que en Reynosa, curiosamente, no se replicó.

Sería por la lejanía del puente Reynosa-Pharr o porque hubo instrucciones para que no hubiera más personas de las necesarias… El punto de acceso al edificio Aduanal estaba copado por periodistas de medios locales y nacionales, ya que no hubo acceso de la prensa a la reunión.

Solo hubo dos personas que esperaban abordarlo para entregarle sus peticiones. El profesor Alejandro Castrejón Brito, que le entregó un escrito dónde piden que las prestaciones económicas dejen de pagarse en UMAs y una mujer que tiene a su padre enfermo recluido en el penal, quien no pudo ni siquiera acercarse al mandatario.

Los reporteros esperaban que López Obrador saliera en la Suburban en que llegó para que les concediera una entrevista.

Sin embargo, AMLO abordó uno de los tres helicópteros que ya estaban listos para despegar y se dirigió a Nuevo Laredo, dónde esta tarde tendrá una reunión similar a la que tuvo en Matamoros y Reynosa.