-Especialistas advierten de desabasto de agua, aumento en precios y tarifas de servicios y vulnerabilidad del suelo
-Mujeres, las más perjudicadas, reconocen participantes en Seminario Megaproyecto: impactos socioambientales
Rosa Martha Fernández y Lizbeth Álvarez Martínez
Fotos: Lizbeth Álvarez Martínez
SemMéxico, Ciudad de México. Además de desabasto de agua, encarecimiento de servicios básicos y afectaciones a la movilidad, el proyecto Conjunto Estado Azteca aumentará la vulnerabilidad del suelo, advirtieron especialistas, personas defensoras de derechos humanos y habitantes de esa zona al sur de la ciudad.
Durante el seminario Megaproyecto Estado Azteca: impactos socioambientales, organizado por la Red de Mujeres Sindicalistas (RMS), señalaron que a pesar de que las medidas de mitigación propuestas son insuficientes, Televisa, empresa propietaria del coloso, ha buscado —con la anuencia de las autoridades— legitimar el desarrollo inmobiliario, mediante “consultas amañadas”, con las que se quiere convencer de que estos desarrollos no perjudican, sino que benefician y traen progreso, por lo que llamaron a quienes habitan la zona a organizarse e impulsar una consulta ciudadana, cuyo resultado sea vinculante.
La RMS convocó a Natalia Lara Trejo, experta en megaproyectos e integrante de la Asamblea Tlalpan-Coyoacán contra el Proyecto Estadio Azteca; Miguel Soto, de la organización PODER, y a Francisco Cerezo, del Comité Cerezo, que —junto con otras organizaciones— buscan frenar ese complejo, el cual constará de un hotel, un estacionamiento de siete pisos y un centro comercial de cuatro niveles, ya que elevará tarifas de agua, luz y predial, además de que expulsará a quienes menos tienen, proceso que se denomina gentrificación.
Natalia Laraalertó que las medidas de mitigación propuestas por Televisa son inviables e, incluso, riesgosas, como la perforación de un pozo de extracción para subsanar la cantidad de agua que requerirá el desarrollo inmobiliario. Su profundidad sería mayor, en comparación con los que ya existen en las colonias, además de que está proyectado de los ya existentes.
«Más extracción significa más vulnerabilidad del suelo, más agrietamientos; con pozos tan cercanos estamos pensando que también podría haber daños a propiedades aledañas, y tenemos también muchísimas inmobiliarias alrededor que han hecho excavaciones profundas y que vulneran aún más el suelo», observó.
A pesar de ello, afirmó, hasta ahora ni la empresa ni las autoridades han dado a conocer dictámenes de protección civil y gestión de riesgos, lo que mantiene en la incertidumbre a quienes habitan la zona, por el daño que las obras podrían causar a sus viviendas.
Agregó que las medidas para atender los impactos al medio ambiente y a la movilidad también son inviables, ya que, por ejemplo, se plantea la instalación de corredores verdes y de una ciclovía; sin embargo, se trata de una zona en donde las calles son estrechas, por lo que implicaría reducir banquetas o complicar la movilidad vehicular y peatonal.