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Jo-Jo-Jorge Falcón se despide de los escenarios

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Por Je-Je-Jerry Zu


Reynosa, Tamaulipas. Jorge Hernández Ramírez, de oficio comediante, mejor conocido en el mundo de la farándula como Jo-Jo-Jorge Falcón, se retira de los escenarios.

El ícono de la cultura pop, el rey de la gesticulación, más feo que Danny Trejo, más ingenioso que Sancho Panza, siempre imitado y jamás igualado, Jo-Jo-Jorge Falcón está en Reynosa para hacer una presentación estelar de despedida hoy por la noche.

“Fíjense-dijo en su peculiar estilo- cuando llegué hace rato al aeropuerto se acercó a mí un cuate y me dijo: “¿Puedo tomarme una foto, abusando de usted?” Y yo le dije: “No, mejor nomás abrazaditos”.

¿Cuál es el motivo de su retiro?-se le preguntó, en conferencia de prensa convocada por la empresa Moreno Productions.

En sus propias palabras, ya está cansado y necesita disfrutar de su familia por el resto que le queda de vida.

Su actividad artística ha sido extenuante, de un escenario a otro, subir a un avión, entrevistas en la televisión, en los periódicos y las radiodifusoras. Tal ritmo de trabajo ha producido un desgaste en su organismo, pero no está enfermo, sino que se retira en plenitud de sus facultades, a los 72 años de edad.

El comediante confiesa que llegó a desarrollar una adicción por el alcohol.

“A tiempo me he retirado un poquito de la bebida; fui muy pipa, me encantaba tomarme mis wiskys de siempre. Sigo echando mi wisky pero ya me tomo uno a la semana. Antes me tomaba media botella en el show y no se me notaba por el sudor, por la actividad y mi show siempre ha sido muy dinámico. ¡Fíjate! Antes me tomaba media botella. Ahora me tomo la presión, me tomo el azúcar… ¡Sí, por Dios! Antes mis lociones… ¿A qué olía yo? A Brut, Aramís, English Leather, ¿se acuerdan ustedes? Ahora huelo a Vaporub, a Iodex, a bálsamo bengué, a mariguanol”,-bromeó.

Jo-Jo-Jorge Falcón considera que el Internet y la modernidad lo han cambiado todo, y cada vez son menos los comediantes que entretienen a la gente con humor sano y con ingenio.

Ahora la comedia está involucionando,-destacó.

“El Internet ha venido a acabar con eso fresco que teníamos muchos que presentar. Ahora te metes y ves el trabajo de todos en cualquier parte del mundo. Los jóvenes de ahora prefieren a veces las groserías, las mentadas de madre, a que en un show tengan que pensar. El otro día fui a una ferretería y le dije al encargado: “Oiga, señor, quiero unas tachuelas para sujetar las medias de mi novia”. Me dijo: “¿Para las medias? Las medias se ponen con ligas, ¿no?” Y yo le contesté: “Es que mi novia tiene una pata de palo”.

Aunque reconoció que hay gente buena ahora en la industria del entretenimiento, de los llamados standaperos, solo unos cuantos llegan a destacar.

“Un día me dijeron: “¿Coopera para el funeral de un standapero?”

-¿Cuánto?

-Pues con 200 pesos.

Yo les dije: “Pues tenga 2 mil y entierre a diez”.

Cada quien tiene su forma de ser, la gente los va a ver y hay público para todos,-sostuvo.

Apuntó, sin embargo, que su público normalmente iba al centro nocturno a cenar y a consumir bebidas, mientras que ahora, en las presentaciones de los standaperos apenas se toman una o dos cervezas.

Un standapero es aquel comediante que realiza su rutina de pie, como siempre lo hicieron Falcón y otros muchos grandes del espectáculo, solo que ahora se le da una connotación peyorativa, porque basan su actuación en insultos y majaderías.

-Ahora el público es diferente-subrayó. Mi público siempre lo atraje con cosas simpáticas, con humor ingenioso.

-¿Usted cree que se va a acabar eso?-se le preguntó.

-Mira. La verdad, así como vamos, nos vamos a acabar nosotros primero. Está muy fuerte lo del Internet. Desde muy chiquillos se envician con las pantallas que tanto daño les hace a su sistema cognoscitivo. La ven tan fácil. Antes tenían que hacer investigación. Ahora no. Te metes en una página, copias y le pegas. Ahora ya no hacen comedia de calidad. Se está perdiendo el buen gusto por hacer reír con cosas ingeniosas,-dijo. Ahora se agarran de la gente para insultarla y la gente se ríe. “¡Ja, ja, jaaaa!”

Ahora el público se ha deshinibido y se habla de cosas muy fuertes: “Soy lesbiana y mi fruta preferida es la papaya”,-dicen.

“Yo tenía chistes de ese tipo de situaciones, pero diferentes,-apuntó. Están dos muchachas comiendo, llega el mesero y les pregunta: “¿Tortillas?” “¡Nooo! Nada más somos amigas!”

Se refirió también al tema de la generación de cristal. Antes, decirle a alguien pelón o gordo, era más motivo de risa que de enojo, a diferencia de la época actual, donde no puede haber referencias personales.

Bromea de nuevo, para ejemplificar: Llega un jotito a una clínica y dice: “Buenas tardes, señor”. El aludido contesta con una voz grave y cavernosa: “Sí, dígame”. “¿Usted cree que en esta clínica me puedan cambiar de sexo?” “Sí, claro”,-le vuelve a contestar el de la voz gutural. “¿Y usted es el doctor?”-le pregunta. “No. Yo soy la enfermera”.

Asegura que el ingenio es lo mejor para hacer reír sin ofender a nadie: Por ejemplo, en la escuela, la maestra dice a los niños: “Los niños de la A a la M se sientan del lado derecho. Y los de la N a la Y se sientan en el lado izquierdo”. “¿Y los Z, maestra?”-le pregunta un avispado párvulo. “¡Esos se pueden sentar donde quieran!”,-contesta nerviosa la docente.

Y es que recientemente fue asesinado en Veracruz un payasito que hacía humor. Lo citaron para una fiesta donde no había gente y ahí lo emboscaron.

Teoriza que posiblemente, en alguna de sus actuaciones habló mal de alguien que no debía.

Jo-Jo-Jorge Falcón se despedirá de Reynosa este día. Su actuación del adiós será en el Teatro Principal del Centro Cultural Reynosa.