Nueva Orléans, Luisiana, EE.UU. Tras la devastación provocada por el huracán Ida en Luisiana donde ha arrasado la zona con vientos de 150 millas por hora (240 km/h) y ha dejado a toda la ciudad de Nueva Orleans sin suministro eléctrico, el temporal se mueve ahora hacia el norte de EE.UU. como una peligrosa tormenta tropical con vientos máximos de 65 kilómetros por hora.
Ida, que ha ocasionado la muerte de un hombre en Prairieville, a unos 65 kilómetros al noroeste de Nueva Orleans -además de daños en viviendas, oficinas y hospitales y graves inundaciones y marejada ciclónica- se desplaza este lunes hacia el interior de los Estados Unidos sobre Misisipi para cruzar el valle de Tennessee el martes y cerca del centro de los Apalaches el miércoles. El sistema se mueve hacia el norte a 15 kilómetros por hora (9 millas).
Los meteorólogos han subrayado que persisten alertas de marejada ciclónica y tormenta tropical en la desembocadura del río Pearl hasta la frontera entre Alabama y Florida. La marejada ciclónica a la que ha dado lugar Ida rebajará en las próximas horas a depresión tropical y puede alcanzar hasta 1,5 metros de altura.
El gobernador de Luisiana, John Bell Edwards, ha advertido a través de sus redes sociales de la peligrosidad del temporal y ha pedido a la población que se mantenga en sus casas hasta que pase la tormenta.