Dirección General: Jesús Rivera Zúñiga

Familia migrante vive odisea con final feliz… ¿o no?

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Por Jesús Rivera

Reynosa, Tamaulipas. Una familia hondureña de 9 miembros, tres mujeres, tres hombres y tres niños, caminaban a pie por la carretera Monterrey-Reynosa.

Cerca del kilómetro 29, pasando la garita, una camioneta del Instituto Nacional de Migración se ofreció trasladarlos hasta el albergue Senda de Vida, en esta fronteriza ciudad.

El vehículo arribó al albergue poco después del mediodía de hoy. Uno de los elementos del INM comentó que vieron al grupo que caminaba sobre el acotamiento de la carretera, cargando a los niños, bajo un clima moderadamente fresco.

Debido al peligro que enfrentan al trasladarse hasta esta frontera, principalmente por la operación de grupos de la Delincuencia Organizada, las personas accedieron a abordar la camioneta.

Ya en Senda de Vida, los migrantes comunicaron que salieron de su país, Honduras y abordaron un transporte que los llevó hasta Monterrey.

De ahí empezaron a caminar, porque en las redes sociales y en los noticieros dicen que los delincuentes suben a los camiones y bajan a los migrantes sin importar que sean mujeres o niños pequeños.

En tramos caminaban, a veces con un frío intenso y en ocasiones con un clima más benigno. Hubo personas caritativas que les dieron el “raid” en sus vehículos, pero la mayor parte del tramo lo recorrieron a pie.

Pareciera que todo terminó con un final feliz. Los seis migrantes adultos y tres menores de edad fueron recibidos en el albergue donde pasarán la noche de hoy.

Uno de ellos comentó que su destino es Matamoros, donde tienen cita el día 5 con autoridades del CBP norteamericanas.

No obstante, se les advirtió que este es un tramo excepcionalmente peligroso para personas como ellos, de ahí que se les recomendó que esperen al pastor de una iglesia para que éste los lleve hasta su destino, donde esperarán el día de la cita.