Por J. Eleazar Ávila
JAMLET POLÍTICA…
Batman, cordero, nunca Bruce Wayne…
Me reclaman que nada hemos analizado de la llegada de Bruno Arnoldo Díaz Lara al CDE del PRI de Tamaulipas, y de Juliana Garza, así que debo dar gusto a los lectores.
Tengo poco que decir de “Batman”, así le dicen los priístas de su entorno; no lo conozco como muchos piensan, mientras que a Olga, seguramente sí, mucho, mucho más.
Hablar, del cómo llegaron a las posiciones que tienen, podría ser ofensivo, pero no me voy a atorar. No obstante, tenemos que señalar que absolutamente sí conozco a Sergio Guajardo, a Paloma Guillén, a Carlos Solís y a Yahleel Abdala, quien de plano se fue a navegar al Partido Acción Nacional, que tanto aporreó, pero ahora sabemos, fue de dientes para afuera.
Igual los anteriores, porque ahí sí, como todo en la vida, podemos especular y discutir sobre el pasado, cuando al final lo que cuentan son los votos. A la vez, tenemos certeza sobre la sumisión de Sergio Guajardo, Paloma Guillén, Carlos Solís y Abdala, al Partido Acción Nacional de Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
Aquí lo hemos dicho: nada que ver con el PRI de los tiempos de Tomás Jesús Yarrington Ruvalcaba, el desaparecido Eugenio Hernández Flores -el videíto VGA de Navidad no cuenta-, porque “El Güero”, en sus tiempos de gloria, impuso a Francisco Javier Garza de Coss, lo cual es historia básica en la entidad.
El punto es que si los cuatro, luego de la segunda era de Rafael González Benavides, desfondaron económica y electoralmente al PRI. ¿Qué podemos esperar de la presunta capacidad que tenga el No Jefe de la Liga de la Justicia?
Si bien, como decía TYR, la estadística es como las artes plásticas, la manera más objetiva es la de observar la pizarra luego de cada elección, donde es muy evidente que el entreguismo del PRI y las traiciones han provocado que:
Prácticamente todos los ilustres célebres de la vieja guardia, nueva, mediana, remisos, anticipados, anexos, conexos y afanositos, impuestos y demás, se hayan transferido por amor, convicción o dinero al Movimiento de Regeneración Nacional o bien al Partido Acción Nacional.
¿“Batman” los va a regresar? ¿Tiene la capacidad, liderazgo y gerencia de los despojos para convocar a una cruzada estatal, para que exalcaldes, exdiputados, exsenadores, exsecretarios de estado, exgobernadores, ex de todo en la gloria del PRI regresen para que el PRI “Make Great Again”?
En justicia, yo, que fui priista, muy orgulloso priista hasta 2007, como seguramente lo fue AMLO y tantos otros, conozco las tripas de este partido: por sus glorias, sus fracasos y sus traiciones.
La mayor, cuando en el 2000 El Mandilón Político Zedillo entregó el poder al PAN de Vicente Fox, a quien no le quito el mérito, pero caray, que cara nos ha costado el cuento de la democracia.
Me viene a la mente cada día, a cada instante, el resumen de Sócrates sobre la democracia, misma que detestaba porque, en resumen, decía: “Sus peligros son y serán -de derecha o de izquierda- siempre, el populismo, la demagogia, la ignorancia y, en general, la avaricia”.
En resumen: Podemos decir categóricamente que Batman puede tener las mejores intenciones, pero es un presidente protocolario, nunca un líder en el sentido amplio de la expresión.
Eso sí, como muchos, un gerente repetidor de frases para la nota, como lo hace Alejandro Moreno, cuya virtud es el desmantelamiento de este partido en favor de Morena y AMLO.
Pero siempre, la mayoría, como en la oposición, todos provistos de egoísmo y cobardía estratégica. Yo he dicho aquí y lo sostengo: en la Ciudad de México, la inteligencia política se disfraza de “cobardía estratégica” y las ideas personales, siempre están por encima de los intereses de esta sociedad de 130 millones de mexicanos.
Es el caso de los santones de tiempos de alias el “licenciado Peña Nieto”, quien no se cansaba de gritar a todos los vientos: “Que nos vean bien. Este partido político está unido y, en su unidad, este partido es invencible. Reconociendo la aportación de cada militante y de cada simpatizante, en el 2018 tendremos los resultados electorales que todos queremos”.
Tiempos de corderos tricolores, que eso es lo que la mayoría son, en un silencio sepulcral. Personajes que están sentados, los de arriba, en lo ganado, y los de abajo, como es la historia de los pueblos, sobreviviendo.
Terco. ¿Es neta que Batman puede con todo esto? Esperaremos a la pizarra, pero yo apuesto que no, porque este Batman no es Bruce Wayne.
Nostra Política.- “Como todos los soñadores, confundí el desencanto con la verdad”. Aristóteles.
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