Por Jesús Rivera
Reynosa, Tamaulipas. Tras interpretar como amenazas y violencia política de género la advertencia que le hizo el líder del Congreso, Armando Zertuche Zuani de que existen las instancias legales para removerla de la Presidencia de la Mesa Directiva, la también diputada Imelda Sanmiguel presentó anoche una denuncia ante la Fiscalía General de Justicia del Estado.
Acompañada por otros diputados afines a su partido e intereses políticos, dio una conferencia de prensa para detallar por qué considera que fueron violentados sus derechos de mujer.
Por su parte, esta mañana, el Presidente de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO), Armando Zertuche Zuani, publicó en su página de Facebook el siguiente mensaje: “¡Basta ya de manipulaciones, el pueblo está cansado de que le quieran ver la cara! Referente al tema donde la Diputada del PAN Imelda Sanmiguel me acusa de llevar a cabo “Violencia política de género” aquí se observa la clara diferencia de actitudes y claramente la violencia de la cual habla no existe, en cambio de manera agresiva e irrespetuosa me da su “respuesta”. Es más que obvio que se están defendiendo intereses particulares y no del pueblo, que es a quien se debe favorecer”.
La nota es acompañada de la grabación de los hechos ocurridos en la víspera, donde la mujer se acerca de manera rabiosa a su par de MORENA diciéndole lo siguiente:
-Imelda Sanmiguel: ¡A ver, diputado! Que le quede claro. Yo puedo someter a receso cuando se me dé mi gana. ¿Le quedó claro?
-Imelda Sanmiguel: Yo quiero y si quiero suspender la sesión la puedo suspender.
-Armando Zertuche: Tenemos capacidad para removerla también a usted.
-Imelda Sanmiguel: No, no, no. Nadamás no me esté diciendo que por que es una falta si yo puedo someter a receso cuando yo quiera.
En el video se observa que algunos miembros, incluso mujeres, le reclaman por su falta de respeto a quien jerárquicamente es su superior.
Cabe señalar que las sesiones del Congreso Libre y Soberano del Estado de Tamaulipas no se rigen por caprichos o por que a alguien se le dá la gana, sino por un reglamento interno y en base a lo que mandata la ley.