Dirección General: Jesús Rivera Zúñiga

Difícil erradicar el lirio acuático

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Por Jesús Rivera


Reynosa, Tamaulipas. El lirio acuático (Eichhornia crassipes), que ya abarca una buena parte de la superficie del canal Anzaldúas, es difícil de erradicar.

En otros lugares del país, como el Lago de Chapala, en Jalisco, se han tenido que hacer grandes esfuerzos técnicos y económicos para acabar con esa especie invasora.

Eliacib Leija, Director de Servicios Primarios del Municipio de Reynosa, comunicó que hasta ahora se ha realizado el trabajo físico de retirar parte de la biomasa hasta donde el largo del brazo de la retroexcavadora lo permite.

De acuerdo con estudios realizados por la Universidad de Costa Rica, “la capacidad invasiva de esta planta pone en peligro diversos ecosistemas, ya que aprovecha las aguas ricas en nutrientes. Las densas colonias flotadoras causan que el contenido de oxígeno descienda hasta cero debajo de su manto, lo que provoca daños en los ecosistemas”.

Además, “el lirio acuático es una de las plantas más invasoras del mundo, ya que causa efectos ecológicos y socioeconómicos”.

La tasa de crecimiento de esta especie puede ser de hasta el 100% de la superficie cubierta en tan solo 15 días.

En la actualidad, el lirio acuático es visto por el grueso de los habitantes de Reynosa como algo curioso, pero que no representa peligro alguno.

“Ayuda a producir más oxígeno”,-dicen en redes sociales.

Pero los especialistas están de acuerdo en que la introducción de una especie invasora en un ecosistema siempre es catastrófica.

Eliacib Leija apuntó que resulta muy difícil retirar por la vía mecánica toda esa biomasa y ya se estudian algunos otros métodos, como la utilización de bacterias.

Algunas otras soluciones incluyen la disminución de la contaminación de las aguas para evitar que el lirio tenga suficientes nutrientes y, eventualmente, utilizar toda esa masa vegetal para producir biocombustible o compostas.

El Departamento de Biotecnología de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) de Iztapalapa calcula que el costo por limpiar solo una hectárea del lirio sería de alrededor de 70 mil pesos, con métodos convencionales, como el uso de maquinaria pesada.