EDITORIAL
Reynosa, Tamaulipas. La Cuarta Transformación -aseguran ideólogos de la izquierda actualmente en el poder- es precedida por tres grandes movimientos sociales: La Independencia, la Revolución y la Reforma, cada una con sus héroes, mártires y prohombres, a saber: Hidalgo y Morelos, Madero y Juárez.
La actual etapa de transición tendría como figura visible al Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Pero para algunos analistas políticos, tales cambios serían también interpretados como la Cuarta Transformación del Partido Revolucionario Institucional, por los siguientes motivos:
1.- Nace como Partido Nacional Revolucionario (PNR), el 4 de marzo de 1929 bajo la batuta del entonces Presidente de la República Plutarco Elías Calles. (Primera Transformación).
2.- En 1938 cambió a Partido de la Revolución Mexicana (PRM), luego de la ruptura entre Calles y el nuevo Presidente, Lázaro Cárdenas. (Segunda Transformación).
3.- En 1946 fue refundado como Partido Revolucionario Institucional (PRI), adoptando los colores y siglas actuales. (Tercera Transformación).
4.- En el 2000, el PRI perdió por primera la Presidencia de la República desde su creación. El Partido Acción nacional (PAN) triunfó con Vicente Fox, y repitió con Felipe Calderón en el 2016. En el 2012 retomó el poder con Enrique Peña Nieto, pero en el 2018 la alianza de MORENA, Partido del Trabajo (PT) y Partido Encuentro Social (PES) lograron lo que parecía imposible: Llevar a una figura de la izquierda a la máxima magistratura del país.
Fue gracias a la incorporación de miles de priístas que MORENA pudo extrer y aprovechar todo su expertís político para ganar esa elección. A la fecha, siguen sumándose ex militantes del Revolucionario Institucional, desplazando incluso a personas que durante décadas lucharon desde la trinchera de la izquierda para hacer de México un mejor país.
Hoy, los mismos analistas consideran que MORENA es el nuevo PRI. El PRI solo cambió de piel, pero sigue siendo el mismo.
Y aquí tenemos la Cuarta Transformación del PRI, la 4T famosa.