ATISBOS
Lic. Rodolfo Martínez Galván
La decisión de la cámara de diputados de eliminar el fuero y separar del cargo al gobernador de Tamaulipas, lógico que causó opiniones y posiciones encontradas que por ventura no han salido del llamado espectro político, incluso la marcha de ayer en #Reynosa para respaldar a Francisco García Cabeza de Vaca fue ordenada.
Sin embargo, en el transcurso de la semana podrían registrarse actos de gobierno que ocasionarán convulsiones, todo depende de si en la Suprema Corte de Justicia de la Nación admiten o rechazan la controversia constitucional que el Congreso del Estado anunció promovería en contra de la Cámara Baja.
Si es rechazada alguien pedirá se de cumplimiento a la determinación de la Cámara de Diputados, que si solamente se constriñe a nombrar un gobernador sustituto no habrá mucha alteración en Tamaulipas, en cambio, una desaparición de poderes -inviable en mi opinión-, trastornaría la actividad productiva y de paso dañaría las campañas políticas.
Por lo pronto, el desafuero de García Cabeza de Vaca no ha perturbado la actividad de los candidatos panistas en Reynosa, denotan tener una estructura a prueba de contingencias políticas lo que les infunde ánimo con todo y que el jefe político de ellos está en problemas.
Y muy lamentable el deceso de Othoniel Ochoa Guerrero, muy pródigo con esa invaluable moneda que es la amistad y por eso desde ayer se advirtió por las redes sociales la consternación que causó su fallecimiento.
Recuerdo con que orgullo platicaba de sus hijos que bien correspondieron a sus esfuerzos, como también reaparecieron en mi mente las ocasiones en que me tendió su mano cordial. Así era de generoso y de vertical como servidor público.
Mis condolencias para su familia y de todos los que tuvimos la oportunidad de disfrutar su amistad.