Dirección General: Jesús Rivera Zúñiga

Cabeza de Vaca no quiere soltar el poder

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EDITORIAL


Reynosa, Tamaulipas. A ocho días para que concluya la presente Administración estatal, el Gobernador desaforado Cabeza de Vaca se aferra al poder de manera desesperada.

Gracias a que aún controla el poder judicial, amaga con liberar órdenes de aprehensión en contra de familiares, colaboradores, alcaldes y personajes que apoyaron la coalición “Juntos Hacemos Historia”, que postuló al hoy Gobernador electo, Américo Villarreal Anaya.

Este último, en conferencia de prensa, denunció un siniestro plan orquestado por Cabeza de Vaca para dar un golpe de estado y evitar que llegue el nuevo gobierno.

En los últimos días ha filtrado a medios nacionales información falsa con el propósito de confundir a la opinión pública, pero más aún, para tratar de influir en los ministros de la Suprema Corte de Justicia que darán su veredicto el día 28 de este mes sobre el recurso presentado por el PAN contra el resultado de la elección del 5 de junio.

Buscan demostrar que hubo participación de la delincuencia organizada a favor del candidato triunfador.

Es tal el aferramiento de este personaje al poder, que la gobernabilidad política pende de un hilo.

Al tener mucho que perder, Cabeza de Vaca pretende descarrilar la voluntad ciudadana, hacer que se anule la elección y poner a un incondicional al frente del Estado.

Con esto garantiza por lo menos seis años más de impunidad, y el manejo discrecional de las finanzas públicas y la agenda estatal.