Por Pegaso
Aquí les presento una sabrosa colección de chistes de tartamudos.
A quien n o le gusten los chistes de tartamudos o sea un tartamudo, puede saltarse hasta donde dice: “Y aquí los dejo con el refrán…”
-Perdona ¿cómo te llamas?
-Pe-pe-pedro An-an-an-Antoni-toni-tonio.
-¿Eres tartamudo?
-No. El tartamudo era mi padre y el del Registro Civil un hijo de la chingada.
Iban tres tartamudos en una moto a más de 300 kilómetros por hora y de repente el de en medio empieza a decir:
-¡Ja-ja-ja…!
El que iba manejando le pregunta:
-¿Po-po, po-po, porqué te te te ríes ta-ta-tanto?
A lo que le responde:
-Ja-ja-jaime se ca-cayó.
Llega un tartamudo a una tienda de animales y pregunta:
-Cu-cu, cu-cuanto va-va-valen los lo-lo-loros?
Le contesta el empleado:
-Este vale 200 pesos, este 500 y este otro mil pesos.
-Po-po, po-porqué cu-cuestan ta-ta-tanto?
-Pues porque saben hablar mejor que tú.
Un hombre llega a la casa de un amigo, que era tartamudo, para contarle sus cuitas de amor:
-Fíjate que mi mujer me engañó y se fue con otro…
-Lo que-que tú ti-ti-ti-tienes que-que ha-ha-hacer es-es o-o-olvi-vi-vidarla pa-pa-para si-siempre pa-pa-para que de-de-dejes de es-es-estar su-su-sufri-sufri-sufriendo.
-¡Claro! ¡Para ti es fácil decirlo!
Estaba el General Diplomado de Estado Mayor, Comandante de la Octava Zona Militar dando las instrucciones a los reclutas:
-¡Tadeo Rodríguez!
-¡Presente!
-¿Ocupación?
-Chef.
-¡A la cocina!
-¡Jorge Pérez!
-¡Presente!
-¿Ocupación?
-Mecánico.
-¿Al taller de tanques!
-¡Guadalupe Hernández!
-¡Presente!
-¿Ocupación?
-Ta-ta-ta-ta…
-¡A las ametralladoras!
El capitán de una de las carabelas que descubrieron América era tartamudo. Antes de partir da instrucciones a los marineros:
-Cu-cu, cu-cuando yo di-di-diga Ti-ti-ti-tierra a la vi-vi-vista, to-todos se ti-ti-tiran al a-a-agua pa-para na-na.nadar ha-hasta la co-costa.
-Luego de varios días de navegación, el capitán les dice:
-¡Ti-ti-ti…!
Y todos se lanzan al agua sin esperar a que el capitán termine la frase_
-¡Ti-ti-tiburones!
Y aquí los dejo con el refrán estilo Pegaso: “A magnífico asimilador, escasas expresiones verbales”. (Al buen enten-entendedor po-pó, po-pó, popocas palabras)
