Por Pegaso
Guión para una película de Hollywood
Un peligroso y violento grupo delictivo mantiene secuestrado a un pueblo de la frontera.
Nadie sale ni nadie entra. Se ha convertido en un búnker inexpugnable.
El jefe de los mafiosos cuenta con un ejército de de hombres armados hasta los dientes y un arsenal de miles de armas de fuego, pertrechos de guerra y vehículos acorazados.
En la capital del Estado se reúnen miembros de la Policía y el Ejército para buscar alternativas y lograr la recuperación de la ciudad, donde viven más de medio millón de aterrorizados habitantes.
Se quiere evitar una guerra, puesto que los delincuentes mantienen como rehenes a los ciudadanos y amenazan con iniciar una gran masacre.
Alguien recomienda que se contrate a personajes de probada eficacia, peritos en el manejo de las armas de fuego y expertos en artes marciales: Arnold Schwarzenegger, Silvester Stallone, Jason Stathman, Dolph Lundgreen, Jean Claude Van Damme, Bruce Willis y Steven Seagal, pero resulta que piden carretadas de dólares por hacer una limpia, además de cobrar regalías.
No queda más que buscar y convencer a los Pistoleros Famosos de que le entren al toro por los cuernos.
Se comisiona a un jefe militar para la búsqueda, ubicación y diálogo con cada uno de ellos. Tiene la encomienda de ofrecerles amnistía por los delitos en que incurrieron a lo largo de su vida de bandidos, así que empieza a recorrer los pueblitos del norte de tierras tamaulipecas, de Reynosa hasta Laredo.
Al primero ubican es a Dimas De León, quien se encuentra tomando tranquilamente en un bar de Matamoros. Antes de que un velador lo mate por la espalda, el militar lo saca del lugar y le pide participar en un grupo de élite capaz de acabar con los malvados que tienen secuestrado a aquel sonriente y antes pacífico pueblo.
El siguiente en la lista es Lucio Peña, un contrabandista que estaba detenido en una cárcel texana. El militar paga la fianza y le ofrece eliminar su historial delictivo en México si decide participar en ese trabajo.
A Silvano Gracia lo ubicaron en China, Nuevo León y a Generoso Garza Canto, en un camino rural del sur de Texas.
Más adelante se presentaron todos ellos en el rancho de La Piedra, propiedad de la familia Del Fierro, para dialogar con Daniel, el más valiente de la dinastía.
Total, también lograron conseguir los servicios de Ezequiel Rodríguez, José López, Toño “El Aguacate”, Chito Cano y Arturo Garza Treviño.
De esa forma, los diez pistoleros famosos lograron burlar la vigilancia que mantenía el grupo delictivo, ubicaron al jefe criminal y lo mataron, antes de dar la señal para que los soldados ingresaran para acabar con el resto y liberar a aquellas buenas personas.
Lo repito. Es un guión para una futura película de Hollywood.
Creo que con algunos ajustes y un presupuesto de algunos 200 o 300 millones de dólares, sería un taquillazo, superando incluso a producciones como “Los Indestructibles”,“Rápidos y Furiosos” y “Duro de Matar”.
¿Qué les pareció la idea?
Mejor nos vamos con el infumable refrán estilo Pegaso, cortesía de los Cadetes de Linares que a la letra dice: “Fallecieron por ser varones, no a consecuencia de su vida delictiva”. (Murieron porque eran hombres, no porque fueran bandidos).