Dirección General: Jesús Rivera Zúñiga

Al Vuelo-Milton

COMPARTIR

Por Pegaso

El Huracán “Milton”, que llegó a tener categoría 5, la máxima en la escala Safrir-Simpson, tuvo un comportamiento anormal.

Se formó frente a las costas de Tamaulipas, pero su trayectoria fue hacia el este, contrario al resto de los ciclones, que se generan en el Atlántico, el Caribe o el mismo Golfo y se desplazan hacia el oeste por influencia de la fuerza de Coriolis.

Sin embargo, con “Milton” confluyeron algunos otros factores, aparte de esa variable: La temperatura del mar, que permitió un rápido fortalecimiento, la presencia de un frente frío que actuó como anticiclón y la existencia de una enorme zona de baja presión.

Lo demás ya lo sabemos. Se acercó peligrosamente a Yucatán y en este momento se enfila en aguas profundas del Golfo de México rumbo a Florida, donde seguramente pegará como huracán categoría 3 o 4.

En Tampico y Madero, la gente hizo un jolgorio porque el fenómeno tropical se alejó en vez de acercarse.

Todos por allá lo atribuyen a los OVNIS, porque aseguran que los aliens tienen una base cerca de la costa y defienden a la Zona Conurbada de cualquier amenaza natural.

Los meteorólogos saben otra cosa.

Los huracanes, como cualquier otra fuerza de la Naturaleza, se mueven por principios físicos.

Ya hablamos de la fuerza de Coriolis y los anticiclones, que forman una especie de barrera a finales de septiembre, durante el mes de octubre y noviembre, impidiendo que afecten el litoral de Tamaulipas.

No es una ley, pero sí una tendencia y miren: Al inicio de la temporada de ciclones, entre mayo y junio, lo más probable es que las tormentas tropicales se desplacen hacia el sur, crucen el Istmo de Tehuantepec y se pierdan en el Pacífico.

Entre julio y principios de agosto, las probabilidades de que un fenómeno tropical afecte las costas de Tamaulipas se incrementa. Puede llegar alguno a Soto la Marina o San Fernando, como ocurrió con Gilberto o más recientemente, con Alberto.

A finales de agosto y el mes de septiembre, la trayectoria los llevará más hacia el norte, hacia la desembocadura del río Bravo, Corpus Christy y Galveston.

En octubre y noviembre, con los frentes fríos cada vez más intensos y frecuentes actuando como anticiclones, la desviación será mucho mayor y la trayectoria será hacia Lousiana y Florida.

Son pocos los huracanes que son la excepción de la regla.

Es bueno saber que la Naturaleza obedece a factores que pueden calcularse gracias al adelanto de la tecnología.

Por ejemplo, desde la formación misma del sistema de baja presión que evolucionó en el Huracán “Milton” de Categoría 5, se sabía que se movería hacia el este y pasaría “rozando” la península de Yucatán, para después dirigirse a las inmediaciones de la península de Florida, como ocurre en estos momentos.

La ciencia de la Prospectiva nos permite conocer con mucha anticipación cuál será el comportamiento de un fenómeno natural.

A la fecha, sin embargo, aún no se desarrollan métodos para predecir los terremotos. Es más fácil saber cuándo pasará un cometa cerca de La Tierra y a qué distancia lo hará, que anticipar el próximo temblor de tierra.

Viene el refrán estilo Pegaso: “A pésimo temporal, excelente rostro”.  (Al mal tiempo, buena cara).