Por Pegaso
Es tiempo de definiciones.
En los siguientes cinco o diez días, los actores políticos de MORENA que buscan la candidatura a la Presidencia Municipal de Reynosa, tienen que ser inteligentes y jugar su mejor carta.
Y la mejor carta que pueden jugar es unirse al candidato con mayor apoyo ciudadano, con una carrera limpia, sin cola que le pisen y con un excelente currículum.
No se hagan bolas: Ni los huachicoleros, ni los rufianes, ni los que pretenden comprar la candidatura tienen posibilidades de llegar a ser candidatos; bien harían en someterse a un acto de contrición y con algo de humildad, buscar apoyar la causa que mayores posibilidades de triunfo tiene ante un PAN herido de muerte.
Porque no hay nada más peligroso que una fiera herida. Y si está acorralada, resulta aún más perniciosa.
Dentro de pocos días, la Comisión Nacional de Candidaturas de ese partido dará a conocer quién estuvo siempre delante en las encuestas realizadas, y no habrá sorpresa alguna.
En las próximas horas empezarán los pronunciamientos y adhesiones en favor de un personaje del cual no quiero decir el nombre por temor a herir susceptibilidades.
No me lo crean. Déjense llevar por las fake news que abundan en estos momentos en las redes sociales, pero al menos ya me han dicho dos o tres de los ocho aspirantes, que están listos para declinar a favor de esa opción.
Incluso conocidos personajes de otros institutos políticos podrían sumarse al proyecto que goza de las simpatías de las cúpulas de MORENA y del PT, que entrarán en coalición.
No digo más para no pecar de fantasioso, pero quiero proponer un bonito ejercicio de aritmética elemental.
El aspirante en comento sacó 79 mil votos en su distrito, en la pasada elección federal intermedia.
Si consideramos que Reynosa tiene dos distritos, el 9 y el 2, y que la cantidad de votantes es parecida en ambos, nos da una cifra cercana a los 160 mil votos en todo el municipio, resultado que sería histórico para un padrón de casi medio millón de sufragantes.
Estamos en tiempos de definiciones, donde la noche parece más oscura por la turbulencia que causan la desinformación y la guerra sucia.
Lo bueno es que ya se está armando la mejor propuesta.
El que lo entendió, lo entendió. Y el que no, pos no.
Concluyo mi colaboración de hoy con el refrán estilo Pegaso, cortesía de mi ídolo Javier Solís: “No obstante tus órganos de la visión cerúleos, pigmentación que poseen la bóveda celeste y el océano”. (Y sin embargo tus ojos azules, azul que tienen el cielo y el mar).