Por Pegaso
¿Han oído hablar del ángel del carnal Marcelo Ebrard?
Es un plan para aumentar los niveles de seguridad en México gracias a la aplicación de tecnología de punta de la cual, dice, adoptaría de los países donde ya es una realidad, cuando llegue a ser Presidente de la República.
Después de presentar lo que llamó “Avanzadas Normas de Geo Localización” (A.N.G.E.L., por sus siglas), se comprometió a hacer de México un país libre de delincuentes.
Por ejemplo, una de las formas para combatir la inseguridad será analizar la forma de caminar de las personas.
Una cámara captará nuestra grácil figura en las calles y luego un programa analizará nuestros movimientos para saber si somos delincuentes en potencia.
Eso me recordó la película Pedro Navaja (Estrenada en 1984. Director: Alfonso Rosas Priego. Protagonistas: Andrés García, Maribel Guardia, Sasha Montenegro y Sergio Goyri), el cual, según la canción, tenía un “tumbao” muy especial para caminar.
De haber existido las cámaras de Ebrard en aquel tiempo, la guapa Maribel Guardia hubiera sabido que el malvado Pedro Navaja la iba a matar, enterrándole un cuchillo en la barriga.
El carnal Marcelo pretende poner un chingo de cámaras en todo el país.
Luego de que dio a conocer su proyecto A.N.G.E.L., el ingenio popular no se hizo esperar, y pronto aparecieron memes donde se le compara con el “Big Brother” y su panóptico.
Panóptico, por si alguien no lo sabe, es aquel lugar o dispositivo desde donde se puede ver todo. En algunos lugares ya hay panópticos, por ejemplo, en el café Tip’s de mi amigo Carlos Varela, donde hay una pantallota para captar todo lo que ocurre dentro del lugar, con cámaras instaladas en la pared y en los techos para que nadie se salga sin pagar.
Muchas críticas ha recibido el excanciller, porque especialistas aseguran que lo que propone no tiene nada que ver con la realidad de México, donde los que mandan son los narcos y la inseguridad no se va a ir como por arte de magia.
Si en la actualidad las cámaras del C5 son tumbadas a cada rato, no me imagino qué harán con las camaritas del carnal Marcelo.
Por desgracia, somos un narcoestado, con un narcopueblo que gusta de las narconovelas, los narcocorridos y utiliza el narcolenguaje.
Somos un Estado fallido. Ni con una cámara en cada casa se podría combatir lo que se hace abiertamente, a cada día, en cada momento y en cada lugar en las narices de los soldados y los policías, o con la complicidad de ellos.
Ya me imagino: Si una cámara capta a una persona caminando medio raro, inmediatamente el programa dirá que es un narco y le caerán como a Juan Charrasqueado los de la Guardia Nacional, la Guardia Estatal, la Policía Ministerial, la Policía Federal, el Ejército y la Marina.
Pero si la misma cámara y programa captan a otro sujeto que camina derechito, derechito, aunque ande armado hasta los dientes, lo dejarán que siga su camino sin siquiera molestarlo.
Todo eso nos lleva a una conclusión: Los mexicanos somos campeones mundiales en el arte de la simulación.
Así como el carnal Marcelo propuso un plan contra la inseguridad, solo para atraerse más simpatizantes, todo lo que dicen los demás candidatos, los gobernantes, los legisladores y hasta el empleado del OXXO, tiene como propósito enmascarar la realidad.
Y así, cuando el cabecita de algodón dice que a él no le interesa el dinero, que no está en la política para hacerse rico, lo más probable es que sea así, pero sus colaboradores y familiares no piensan lo mismo que él.
Dejarlos hacer a su antojo, es tanto como si él mismo lo hiciera.
Lo importante es que el proyecto de Ebrard es solo una más de las simulaciones y mentiras a que nos tienen acostumbrados nuestros inefables políticos.
Termino con el refrán estilo Pegaso: “Que proceda a adquirirte el individuo que ignore las características propias de tu persona”.(Que te compre quien no te conozca).