Por Jesús Rivera
Reynosa, Tamaulipas. Mientras que el año antepasado se registró un aforo superior a los 10 mil visitantes en el panteón municipal Sagrado Corazón, en esta ocasión se ha establecido un aforo del 75%.
El sábado y domingo pasados fueron aprovechados por muchas familias para visitar las tumbas de sus familiares fallecidos. Muchos de ellos perecieron a causa del COVID-19.
En este día feriado, cuando se celebra en México a los Fieles Difuntos, los que no vinieron el fin de semana aprovecharán para cumplir con el ritual ancestral de recordar a sus difuntos, recordando las cosas que les gustaban y compartiendo anécdotas familiares.
En este momento, fuera del panteón, los comerciantes de flores, pan de muerto y artesanía mexicanas se preparan para ofrecer a los visitantes todo aquello que necesiten como ofrenda para sus muertos.