Por Jesús Rivera
Reynosa, Tamaulipas. Usuarios del servicio de agua potable y alcantarillado se encontraron con un nuevo aumento en sus recibos.
“Simplemente, no hay agua”,-dijo un funcionario del área de altos consumos de COMAPA.
El organismo operador recibe actualmente el agua cruda del río Bravo gracias a un convenio con la Comisión Nacional del Agua.
El problema de la escasez del líquido es uno de los más graves que enfrentan los gobiernos estatales y municipales del norte y noreste del país.
La prolongada sequía mantiene casi vacías las presas y con grandes dificultades se entregan volúmenes mínimos para el consumo humano.
El Gobierno Municipal y la COMAPA han establecido tandeos para racionar el suministro del agua que llega a los hogares.
A la fecha, solo el 16% de los usuarios pagan regularmente sus servicios, lo que significa que ese sector de la población está subsidiando al otro 84% que se roba el agua.
El funcionario admitió la incapacidad del organismo de recuperar todo ese dinero que deja de entrar a sus cajas.
Recientemente se llevó a cabo un programa de regularización donde el Municipio aportó una parte, otra de la Iniciativa Privada y el resto, del propio usuarios, pero no hubo la respuesta esperada y el problema continúa.
Dentro de poco tiempo el agua potable tendrá un precio tan elevado que incluso podrá superar el cobro de otros servicios, como la electricidad, el cable o los servicios de telefonía.
Un usuario comentó que si la factura que llega mensualmente sigue subiendo, pronto los recibos serán impagables. El agua será un privilegio de pocos y será inalcanzable para la gran mayoría de la población.