Por Jesús Rivera
Vándalos arrancaron una de las alas del ángel que se encuentra en la base de la figura de bronce de la Virgen de Guadalupe, en la pequeña expanada que se ubica a un lado del edificio parroquial.
La figura, donada a la parroquia por una asociación civil hace unos veinte años, ha sufrido varios incidentes a lo largo de ese tiempo.
El 1 31 de mayo de 2016, una tromba que afectó la región de Reynosa tumbó la pared completa donde originalmente se había colocado, rompiendo la figura de Juan Diego que acompañaba el conjunto. Solo la estatua de aproximadamente 2.5 metros de alto y peso de más de 200 kilogramos, pudo resistir el impacto directo con el suelo, por estar construida principalmente de metal.
Hace algunas semanas, en pleno diciembre, personas desconocidas prendieron fuego a las flores secas que estaban en la base del monumento, sin que sufriera daño alguno.
El pasado 9 de marzo, alguien, con algún objeto contundente, goleó el rostro del ángel y posteriormente arrancó una de las alas, como se muestra en la fotografía.
Este acto de vandalismo fue criticado en uno de sus últimos sermones por el párroco de ese templo, pero hasta ahora no hay un comunicado o pronunciamiento de la jerarquía católica.