Por Jesús Rivera
Reynosa, Tamaulipas. El rap como herramienta de transformación social. Así se puede sintetizar la propuesta de Alfredo Martínez, cuyo nombre artístico en el mundo del hip hop y el free style es “Danger Alto Kalibre”.
Pero lejos de representar un peligro, pretende convertirse en un agente de cambio, pero de cambio positivo, donde los jóvenes que están en contacto con la violencia y las drogas puedan utilizar el arte y la cultura para aportar soluciones a una sociedad en constante evolución.
“Danger” se presentó hoy ante un numeroso grupo de jóvenes que admiran su talento. En la conferencia que dirigió a sus admiradores, titulada: “El rap, una herramienta de transformación social”, resaltó la importancia de los valores y de cómo pretende informar e inspirar a los jóvenes para que sigan su ejemplo.
El evento se llevó a cabo gracias al colectivo RH Family, cuya representante es Monserrat Castillo, con el apoyo de la Delegación Reynosa del Partido Movimiento Ciudadano, a cargo de Doris Cantú Robles y la dirigencia estatal que encabeza Juan Carlos Zertuche Romero.
Además de la conferencia, también se contó con la participación de raperos y hip hoperos como Young Famas, ICE R, Black Monkey Studios, Versos con Visión y El Bandera, todo ello, en forma gratuita para la juventud reynosense.
UN ACERCAMIENTO AL ARTE Y LA CULTURA
En la entrevista previa a la conferencia, “Danger” mencionó que todos los jóvenes desarrollan inquietudes de forma orgánica.
“Está en nuestro ADN las ganas de destacar, de sobresalir, de buscarnos, de formarnos, que los demás nos acepten y respeten. Muchas veces, en algunos conceptos que crecimos, muchas veces desfavorables o de carencias, sobre todo educativas y de formación necesitamos encontrarnos. El hip hop y el movimiento urbano es un acercamiento al arte y a la cultura nos da estas herramientas de empoderamiento. Eso hace que los jóvenes descubramos que somos creadores y que tenemos la capacidad de desarrollar pensamiento crítico, y ese pensamiento crítico nos va a ayudar a buscar la mejor versión de nosotros mismos”,-aseguró.
Ha llevado su arte a una docena de países alrededor del mundo y es autor de por lo menos tres álbumes con música de rap y hip hop denominados: Lodo en la alfombra (2014), Sembrando laureles (2017) y Moebius (2019).
Ha recibido varios premios nacionales e internacionales, entre los que se encuentra el Premio Generation Change de MTV Europe Music Awards, en 2019.
Creció en un barrio de Tijuana, rodeado de contextos violentos. Aseguró que el rap le permitió ver desde aquellos años que también podía levantar la voz y decir lo que sentía, cuestionar las cosas que sabía que estaban mal.
Conferencias como la que dio esta tarde en Reynosa pretenden introducir esa semilla, para que busquen la mejor versión de sí mismos a través del arte urbano, pero también a través de cualquier pasión que tengan.
“Tener la capacidad y el valor de seguir sus sueños”,-apuntó.
NADA DE APOLOGÍA DEL DELITO
Su música, sus ritmos, nada tienen que ver con las modas que hacen apología del delito.
“Danger” se manifiesta enteramente a favor de la libertad de poder expresarse, pero niega que le gusten y consuma ese tipo de contenido.
“La apología a la violencia, desde cualquier arte, es un tema complejo, porque también cruza otras violencias. Esta gente que está compartiendo esa realidad tienen un punto a favor: Es una realidad. No están inventándose una película. A mí me parece un termómetro social. A mí no me gusta esa música. No me gusta cualquier cosa que haga apología a la violencia. A mí me encantaría y yo les digo a los morros en los talleres y en las conferencias: “Háblame de tu realidad, y si tu realidad es violencia intenta ser propositivo. Ya entendimos que vives en un contexto desfavorable y problemático”. ¿Cómo lo cambiamos? Protesta con propuesta. Pero entiendo perfectamente el narcocorrido y entiendo también el rap que habla sobre estos temas porque son jóvenes que crecieron en la carencia, que solo viven de esto y que no podemos exigirles que hablen de algo que no conocen”,-añadió el rapero.
Entender que eso es un termómetro social y aprender a escuchar, dejar de ver el mundo desde el adultocentrismo, es una forma de entenderlos y buscar el cambio.
“Muy facilista es prohibir. Es como censurar. Me parece que hay que hacer un sobreesfuerzo y escuchar, y ver qué podemos hacer para transformar eso, porque una vez que transformas el entorno de los jóvenes, del individuo en general, también transformas la obra,-dijo. Eso es lo que intento: Dar formación por lo menos en un contexto que es muy poco tiempo una conferencia de hora y media, pero intento tocar los puntos, tocar los botones correctos para por lo menos motivarlos, incentivarlos o hacerles ver que el horizonte de posibilidades es más amplio del que creemos a veces. Es empezar a hacer una formación de agentes de cambio por medio del arte”.
Alfredo Martínez y su alter ego, “Danger” subrayan que la moral y la ética que se observa en la sociedad dependen del contexto histórico y geográfico.
Por ejemplo, niños que se suicidan porque sus padres no los dejan escuchar la música de “Peso Pluma”, o en el extremo opuesto, padres permisivos que permiten ese tipo de influencias para sus hijos menores.
En la sociedad actual, cada vez olvidamos más cómo ser buenos padres y eso se refleja en el comportamiento de una juventud en busca de identidad.
“Yo cuestiono desde mi trinchera que es el hip hop a mis compañeros que llevan ese tipo de mensaje. Lo cuestiono, más no soy capaz de la censura ni del señalamiento. Creo que la palabra tiene una responsabilidad. Hay una nueva era que es la del Internet. Los jóvenes que crecen pensando que el anonimato en Internet les da posibilidades de decir lo que quieran cuando quieran sin responsabilidad y eso es difícil de erradicar. Lo que hay que hacer es intentar concientizar que la palabra tiene un poder y un peso y que eso, una vez que tú subes algo a Internet ya no lo puedes borrar nunca, y en algún punto vas a pensar diferente. Yo espero y propicio que la gente siempre esté pensando diferente y cambie su forma de pensar. Y si los jóvenes, yo les digo: “Te arrepientes de lo que pusiste en Facebook hace dos años, porque te pareció muy tonto, imagínate ahora en diez años que escuches lo que estás diciendo en el micrófono, que no lo vas a borrar nunca y que tus hijos lo van a ver”,-aseguró.
CREER EN LA EJEMPLIFICACIÓN
Más que en las figuras de autoridad, “Danger” cree en la ejemplificación.
“Desde su experiencia propia, las figuras de autoridad hacen que busquemos la rebeldía. Hay que ser muy cuidadosos y muy estratégicos en cómo guiamos esta información para que ellos sientan que están descubriendo también este hallazgo y no que se los estás imponiendo”,-subrayó.
Siendo el arte y la cultura una expresión que pertenece a la sociedad, es difícil que tenga el peso suficiente para ser el factor principal de ninguna desgracia,-aseguró.
Se requiere de una serie de factores negativos para tener resultados catastróficos.
“No podemos culpar al arte, a la música, a la pintura de uno de estos hechos trágicos”,-dijo, refiriéndose al caso del jovencito que se suicidó por influencia de los “corridos tumbados”.
A final de cuentas, es responsabilidad de los padres cuidar lo que comen sus hijos, cuantimás de lo que escuchan y ven “porque es igual de dañino y nuestros sentidos son la forma de entender nuestro mundo, nuestra realidad. El sentido auditivo y visual son muy importantes para nuestra formación. Y sí, la responsabilidad de los menores de edad, socialmente y jurídicamente, en nuestra sociedad, es de los padres”.
La conferencia se desarrolló de una manera amena, con jóvenes que participaron de la charla y que se sintieron alentados a seguir adelante con sus propias aspiraciones y potencialidades.