Por Pegaso
¡Amiga candidata!¡Amigo candidato! Si usted quiere hacer una campaña bien chida y no quiere gastarse un solo peso en publicidad, siga los geniales consejos de nuestro buen amigo Luis Espino, candidato del Partido Movimiento Ciudadano a diputado local.
Empiece por contactar a la mayor cantidad posible de periodistas, incluyendo aquellos que tienen un portal informativo.
-Prométales que les dará una buena lana por la cobertura de la campaña. No les de un plazo fijo, sino una fecha tentativa.
-Cuando el plazo se cumpla, dígales que la próxima semana sí les hará llegar el recurso.
-Repita el método hasta que concluya la campaña.
Algunos ya no se tragarán el embuste a medio proceso electoral, pero ya para ese tiempo ha logrado tener una buena cobertura informativa, boletines incluidos, y todo ¡completamente gratis!
No es necesario ni siquiera darles las gracias a los defraudados periodistas porque a esas alturas ya estarán mentándoles la mamá.
Luis Espino irrumpió en el escenario político durante las precampañas.
Recomendado por su tío, Jorge Espino, Auditor Superior del Estado, no batalló mucho para incrustarse como candidato en el partido que manipula a su antojo el vivillo de Gustavo Cárdenas Gutiérrez, alias “Fray Escoba”.
No dudo ni tantito que el plan es el de esperarse hasta el último momento para declinar a favor de los candidatos del PAN, a pesar de que en rueda de prensa dijo ayer que le habían ofrecido un buen billete y no lo había aceptado.
No tengo amistad con él, pero si alguien es su cuate, dígale que la publicidad cuesta.
No es lo mismo publicar, por ejemplo, en un portal como ReynosaPost.com, a un candidato que no trae ni en qué caerse muerto, por el hecho de querer ser parcial, y otra cosa muy diferente es cuando un aspirante que presume de ser muy solvente, como Luisito, prometa la luna y las estrellas, con la idea preconcebida de no cumplir con sus promesas.
En campaña, los periodistas independientes, como un servilleta, suelen buscar acuerdos con los candidatos en temas publicitarios, y eso es válido, porque todos ellos tienen necesidad de lograr la máxima cobertura posible de sus campañas.
Pero una cosa muy diferente es el engaño vil.
No todos los candidatos caen en ese garlito. Es más, ninguno actuó de manera falaz, más que nuestro muy querido y admirado Luisito Espino.
Quédese con su fundación que ayuda a las escuelas en toda América Latina, quédese con sus exitosas empresas de importación-exportación que mueven miles de millones de dólares.
Quédese con sus quinientos votos que obtendrá el próximo 6 de junio.
Difícilmente volverá a la escena política local si pretende continuar con su actitud fraudulenta.
¡Tan fácil que hubiera sido decir que no manejaría publicidad durante su campaña!
Tal vez nadie lo hubiera pelado, o quizás, algún portal, como ReynosaPost.com le habría dado espacios gratuitos sin necesidad de promesas vanas.
Nos quedamos con el refrán estilo Pegaso que dice así: “NI tan siquiera proporcionas alimentación al ave gallinácea de la vehemencia”. (No alimentas ni al gallo de la pasión).