Por Jerry Zu
Reynosa, Tamaulipas. Hulk, Caras del Diablo, Pokebolas, Petardo de la Muerte, Crackers, Krakatoas, Chupacabras y mil artilugios explosivos con nombres aterradores se vendieron libremente en las calles.
Algunos de ellos son capaces de arrancar un brazo a los usuarios si no se tiene la precaución y el conocimiento para hacerlos explotar.
Y eso fue precisamente lo que ocurrió con un hombre que falleció cuando le explotó un cohete en la cara,-según el reporte de Protección Civil y Bomberos.
El poder de la explosión derramó la materia gris a más de siete metros.
Eso ocurrió en la calle Francisco Nicodemo con Estefanía Castañeda, de la colonia Del Maestro, poco después de las 10 de la noche.
Ambulancias de la Cruz Roja y protección Civil acudieron al llamado de auxilio de los familiares y posteriormente se hizo presente la Policía Investigadora. El cuerpo mutilado fue trasladado al Servicio Médico Forense.
Por desgracia, los ciudadanos continúan con este tipo de peligrosos festejos. No solamente se exponen ellos, sino a los que los rodean. En años anteriores se han reportado incendios de casas habitación por los restos de juegos pirotécnicos; han estallado bodegas que contienen artefactos explosivos y han fallecido personas.
Por otro lado, aunque anoche no fue generalizado, el uso de armas de fuego también se escuchó en distintas partes de la ciudad, y las balas perdidas cobran eventualmente vidas humanas, al caer del cielo a altas velocidades.
(Fotografía tomada de las redes sociales).