Dirección General: Jesús Rivera Zúñiga

Rock, vigente como elemento de protesta

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Por Jesús Rivera


Reynosa, Tamaulipas. El rock constituyó un elemento importante de protesta contra el autoritarismo del Gobierno Federal en 1968.

Estaba fresca la represión estudiantil en Tlatelolco cuando, en 1971, cientos de miles de jóvenes se reunieron en el Festival de Avándaro para manifestar sus sentimientos de protesta mediante la música: Uno de esos jóvenes era Wayo Roux, originario de Reynosa, con su banda.

-Wayo, una pregunta, ¿es el rock un elemento de protesta como en sexenios pasados?¿Ahora puede servir para lo mismo?

-Siempre ha sido de protesta, porque la juventud, cuando se creó el rock mexicano en la época del 71, estaba fresco lo del 68, donde hubo la matanza de Tlatelolco, cuando el Presidente Díaz Ordaz. En el 71, con el Festival de Rock y Ruedas de Avándaro, hizo una explosión. Trescientos mil jóvenes asistieron y tuve el honor de estar ahí, cantando con mi banda “La División del Norte”.

Otro rockero que estaba en Avándaro era Alex Lora, con su grupo “Tri sounds of my mind”, que después se convertiría en “El Tri”.

Lora revivió en días pasados el rock de protesta al interpretar su popular canción “Todo me sale mal”, con una letra modificada que critica la actuación del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador.

“Si rifa el avión, no compran boletos/si anuncia dos bocas, se empieza a inundar/si se hace el tren maya, destruyen la selva./ Mejor que se aplique y se ponga a gobernar”,-canta el polémico personaje con su muy peculiar estilo.

Para Wayo Roux, el rock está vigente como una forma de protestar de los jóvenes y no tan jóvenes.

A principios de los 70 se generó en México un movimiento que tuvo capital importancia y desembocó en leyes progresistas que defendían los derechos humanos y la libertad de expresión.

“Ese fue un boom del rock que también fue combatido por el Gobierno y en su momento silenciado por Echeverría”,-mencionó.

-Canalizó las inconformidades, sobre todo de los jóvenes, ¿no?

-Sí. Siempre reprimiendo a los jóvenes, que eran los únicos que protestaban en ese momento. Ese concierto (Avándaro) lo organizaron ellos, pero después hubo una represión tremenda. Clausura total de todos los centros de trabajo donde tocábamos los rockeros y se crearon, -porque el joven siempre busca las coyunturas- los famosos “hoyos funkies”, que eran estacionamientos subterráneos de las empresas que cerraban sábados y domingos y ahí se hacían las tocadas sin publicidad. Nada más corriéndose la voz, porque si llegaba a oídos del Gobierno iban y te clausuraban y agarraban las famosas “perreras”, te agarraban y te subían y te rapaban.

Roux, como muchos otros jóvenes de la época, sufrió la represión gubernamental.

Hoy, a sus 75 años, escucha el Tik Tok viral que subió un admirador de Alex Lora y dice con cierto brillo en los ojos: “Esto puede llegar a prender”.

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