Por Pegaso
Los Simpson también cometen pifias.
Ahí está la “profecía” del apagón mundial que ocurriría, de acuerdo con los personajes color caca, el pasado 17 de noviembre. Y no pasó nada.
Para los crédulos, que esto sea una lección. No compren todo lo que lean, vean o escuchen en los medios de comunicación. Es para manipularlos.
Recientemente salió en televisión, periódicos y redes sociales de todo el mundo que el Congreso y el Gobierno de los Estados Unidos habían admitido que los extraterrestres están entre nosotros y que viven en el fondo del mar.
¡Pamplinas! Se trata de una gigantesca cortina de humo o caja china que los gringos echaron a andar para distraer la atención mundial, mientras se ordenaba el bombardeo a territorio ruso con misiles balísticos de largo alcance.
Yo os invito, ¡oh, ingenuos del mundo! a desarrollar el pensamiento crítico y no dejarse llevar por noticias amarillistas o sensacionalistas.
Miren. Las llamadas “cajas chinas” o “cortinas de humo” son instrumentos psicológicos para distraer la atención del gran público cuando se quiere ocultar, minimizar o disfrazar un tema de mayor importancia.
Vean la película “La Dictadura Perfecta” (estrenada en 2014; Director: Luis Estrada. Protagonistas: Damián Alcázar, Livia Brito, Joaquín Cosío, Alfonso Herrera, Dagoberto Gama, María Rojo y Salvador Sánchez).
Según el argumento de ese largometraje, el entonces Presidente de México (en la peli no dice, pero se trata de Chente Fox) asegura que los mexicanos que trabajan en Estados Unidos son mejores que los negros, lo que provoca un tremendo lío mediático.
Para desviar la atención del público, el gobierno pide a la empresa Televisión Mexicana (para qué nos hacemos tarugos, Televisa) que transmita en horario estelar un video que involucra al Gobernador de un Estado, Carmelo Vargas (creo que se refiere a Tomás Yarrington, de Tamaulipas). Este, para no verse embarrado y seguir con sus aspiraciones presidenciales, decide negociar con la televisora a cambio de muchos millones de pesos para que busquen otra “caja china” o “cortina de humo”.
La televisora, gracias a sus creativos, logra dar con un caso muy mediático: El secuestro de dos pequeñas. La noticia se mantiene al aire durante varias semanas y esto hace olvidar al público el video comprometedor de Carmelo Vargas. La cobertura informativa continúa con los esfuerzos del gobernador por rescatar a las niñas, lo que le reditúa una enorme popularidad y así, sus aspiraciones presidenciales se ven fortalecidas.
Lo que el televidente no supo fue que todo se trató de un montaje, una simulación, una cortina de humo que dio muy buenos resultados.
Así que Los Simpson, los OVNIs (ahora FANIs), las profecías bíblicas y toda esa parafernalia no son más que cortinas de humo para distraerlos de lo que realmente está ocurriendo: El establecimiento de un nuevo orden mundial, no necesariamente benéfico para todos los que habitamos este sufrido planeta, pero sí muy necesario. Quizá se trate de imponer un humanismo evolutivo, similar al de los nazis donde los débiles perezcan y los fuertes sobrevivan, para llegar así a la visión de Nietzche del Superhombre.
¡Ay, nanita! Hasta yo me di miedo.
Y nos quedamos con el refrán estilo Pegaso: “¡Realicen un acto de contrición, seres abyectos!”(¡Arrepiéntanse, pecadores!)