Por Jesús Rivera
Reynosa, Tamaulipas. Desde el 1 de octubre no hay en México importación legal de vehículos usados de procedencia extranjera. El decreto que debía ampliarse en esa fecha, se ha venido postergando y a la fecha, miles de vehículos de modelo 2015 que tienen como plazo el 1 de noviembre están en el limbo a lo largo de la frontera con Estados Unidos.
A nivel local, unas 50 empresas importadoras y comercializadoras de vehículos americanos usados dependen de la importación mediante aduana, además de miles de pequeños negocios que van desde refaccionarias, hojalateras, mofleras, gasolineras y talleres mecánicos que prestan servicios a esas unidades.
En Reynosa hay parados más de mil autos usados modelo 2015 en espera de la ampliación y a nivel Tamaulipas la cantidad supera los 3 mil, apuntó en rueda de Prensa el Presidente de la Asociación de Autos Usados de Reynosa, Hugo Jofre Chávez.
Jofre externó que se trata de un tema muy diferente a la regularización de autos “chuecos”. Ese es un programa promovido por el anterior Gobierno Federal que tiene vigencia hasta ahora.
Por otro lado, la importación por aduana es un proceso que se realiza en base a un decreto. En años anteriores, a pesar de haber cambio de gobierno, no había ocurrido una situación como la que se presenta ahora, sostuvo el comerciante.
Este mediodía, en rueda de prensa, un grupo de ellos presentaron un documento con tres temas principales:
Uno: La información falsa o sesgada que circula en las redes sociales donde se dice que se pueden importar vehículos sin impuestos, conforme al Tratado de Libre Comercio. Sin embargo, este tiene unas regulaciones muy cerradas, como el porcentaje de armado de los vehículos. Los únicos que pueden proporcionar esa información son las ensambladoras, los fabricantes o los distribuidores, de los cuales ninguno de los tres aportan datos al respecto.
A partir del 1 de julio, en el TMEC se resolvió y se dio entrada a que el importador o el proveedor pueda certificar el origen.
“Ese es el tema que traen ahorita las gentes fraudulentas: Que ya puede certificarse el origen en una factura, en un escrito o en un documento, pero también dice que deben cumplir con las regulaciones o restricciones que el TMEC marca para los vehículos, que es el porcentaje de armado, que no se consigue en ninguna parte”-apuntó.
Pidió a la población que no se dejen engañar por ese tipo de información fraudulenta.
Dos: El decreto no ha salido. Se han hecho peticiones a la Presidenta de la República, Claudia Sheinbaum y a los legisladores federales y estatales para que se emita la ampliación al decreto.
Tres: El legítimo reclamo por parte de miles de ciudadanos que viven y utilizan este beneficio que se han visto perjudicados desde el mes de octubre de este año, al no contar con el decreto.
Jofre sostuvo que hasta el momento no han tenido la respuesta que el asunto amerita. Son centenares de empresas importadoras y comercializadoras de autos usados que están paradas, además de compañías privadas y ciudadanos que de manera particular aprovechan el programa. Cada una de ellas tiene en promedio cuatro empleados, pero además, buena parte de los ingresos de los talleres y negociaciones que proporcionan bienes o servicios a los autos usados, depende de que exista esa ampliación al decreto-puntualizó.