Por Jesús Rivera
Reynosa, Tamaulipas. Dentro de los peligros contemplados en el Atlas de Riesgo para los municipios de Reynosa y Río Bravo no se encuentran los depósitos de pólvora ni las continuas balaceras, a pesar de que se han vuelto una constante en los últimos años.
Dentro del apartado de Riesgos Antropogénicos, es decir, aquellos que son propiciados o provocados por las personas, se incluyen simulaciones por explosión de gaseras, gasolineras y ductos.
Se analiza sus efectos de acuerdo a la densidad de población y a la cercanía de centros de estudio, hospitales, centros deportivos, centros religiosos, centros comerciales, centrales de transporte, dependencias de gobierno y en general, todos aquellos lugares donde haya concentraciones humanas.
En el inciso sobre Peligros Químicos, se sigue destacando el tema de las gaseras o gasolineras, donde se manejan sustancias altamente explosivas.
“En la explosión de una gasera o una gasolinera, la radiación térmica es la que mayor afectación podría causar. Dependiendo de los valores de intensidad de la radiación y el tiempo de exposición la afectación varía tanto hacia instalaciones y personas”-señala el texto, y agrega: “A consecuencia de las explosiones, las personas pueden sufrir de forma directa diversos daños que van desde la ruptura de tímpano por la intensidad del ruido, hasta la muerte por hemorragia pulmonar o por proyección del cuerpo. Los daños indirectos incluyen heridas por fragmentos de cristal y proyectiles, así como muerte provocada por colapso de edificios y estructuras”.
El Atlas no menciona en ninguno de sus apartados la frase “acumulación de pólvora”, que fue la causa de la explosión que ocurrió el pasado 2 de septiembre en un domicilio de la colonia Módulo 2000.
A pesar de que se había denunciado la existencia en ese lugar de una bodega clandestina de pólvora para elaborar los infaltables juegos pirotécnicos que se venden al por mayor durante las fiestas patrias y la época decembrina, nada se hizo, porque no existe un protocolo para ese tipo de situaciones.
A nivel estatal se habló el año pasado sobre la necesidad de actualizar el Atlas de Riesgo de Tamaulipas para incluir ese tipo de eventualidades.
COMUNICADO DE SEDENA
Dos días después de que ocurrió la explosión en el Módulo 2000, la Secretaría de la Defensa Nacional emitió el comunicado de prensa 23/2004, donde se indica que por motivo de ese suceso se aplicó el Plan DN-III-E, en su fase de auxilio, en coordinación con agentes de la Fiscalía General de la República (FGR), con motivo de la explosión de un domicilio donde presuntamente se almacenaba pirotecnia de forma ilegal, en inmediaciones de la colonia Módulo 2000, en Reynosa, Tamaulipas.
“El personal militar prestó apoyo y brindó seguridad para salvaguardar la vida de las personas y sus bienes ante las posibles consecuencias derivadas de la explosión”-señala el comunicado.
El suceso causó la muerte de dos personas, varios heridos y daños materiales de consideración.
La SEDENA recomendó a la población a no adquirir ni usar artificios pirotécnicos (cohetes, bengalas, bombas, entre otros) en estas fiestas patrias con el fin de evitar poner en riesgo su integridad física.