Dirección General: Jesús Rivera Zúñiga

Líderes Competitivos

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Por Marcos Olivares

LA CULTURA COMO EJE TRANSFORMADOR DE NUESTRA SOCIEDAD

Ayer platicaba vía remota con un buen amigo de hace años, con quien en un momento de la vida profesional ejercíamos en esquinas contrarias, sin embargo, la vida después de varios años nos pone en su exacta ubicación y nos permite verla desde el cobijo de la madurez.

El tema, el béisbol infantil, comentábamos de las derrotas ante equipos orientales (lo mismo nos sucede en el futbol) le mencionaba que nos han superado por mucho y no nos permiten pasar a la final. Le decía que necesitamos un sistema de mayor rendimiento y calidad, a lo que el me respondió que lo requerimos es “Una Nueva Cultura de Trabajo y Disciplina”.

Eso me recordó de una frase que leí por ahí, que decía, que “para que un gusano de seda se transforme en una mariposa, no basta con ponerle alas”. Muy cierto, la cultura es más que una reforma, una secretaría, un sindicato y una política pública, es toda una transformación pero que se da en el seno del capullo,

Es decir, en nuestros hogares, donde aprendemos los valores básicos de nuestra formación humana, donde nos enseñan el Respeto, la Disciplina, la Honestidad, la Honradez, el Amor a la Patria y el Trabajo como raíz esencial de la Responsabilidad Social y el Compromiso Humano.

Esa transformación no requiere de una ley pública ni de un libro de texto gratuito, necesita de padres responsables, y esa cultura no la aprendieron en la escuela formal, ni sus hijos la aprenderán ahora.

Para lograr una verdadera transformación, la Sociedad Civil Organizada necesita tomar su papel de líder social, guiado por un programa integrador de los valores antes mencionados, con temas tales como, el Civismo y la Ética, por ser normas y costumbres del comportamiento humano, y que el gobierno no contempla en sus cursos y programas educativos.

Mientras en este país, nos desgarramos las vestiduras por el Nuevo Aeropuerto, por las Reformas y Contra Reformas, es decir, contra todo el establishment de la sociedad política, y otros tantos temas innecesarios, le damos la espalda a la gran ola destructiva que arrasa con el tejido social heredado de nuestros padres y de nuestros abuelos, por eso difícilmente creo que dejaremos de ser un país de tercera, creo estaremos más cerca de ser un país de quinta.

La solución está en las manos de nuestros organismos sociales organizados, llámense Sociedad de Padres de Familia, Clubes Sociales, Asociaciones, Sociedades Civiles, Colegios, Organizaciones No Gubernamentales y demás adjetivos; el gobierno genera leyes y nosotros Cultura, Prosperidad, Civilización, Pertenencia y Civilidad, pero sobre todo Bienestar Social.

Para facilitar el camino, es necesario involucrar al magisterio y a los líderes religiosos, quienes, con sus bases académicas y vocación, aportarían una gran cantidad de valores e impulsarían la voluntad social.

Se necesitan de todos, para ponerse en pie de lucha para liquidar las deudas que se tienen con las próximas generaciones, se requiere sustituir las armas por libros, y el ímpetu de la transgresión con la ética. Exijamos Educación de Calidad, pero exijámonos como Líderes de familia y de comunidades, predicar con el ejemplo, practicando buenas costumbres morales y espirituales, y encaminando a las personas que nos rodean a la disciplina y el trabajo responsable.

Estamos en el momento exacto de crear una nueva generación de Liderazgos Competentes, con visión humanista, pero con los pies en la tierra, con objetivos claros y precisos, con perspectiva de sustentabilidad, pero sobre todo, inspiradores de ideas y realidades benefactoras sociales.

Vayamos pues a cambiar paradigmas y crear una nueva y sana sociedad.